“…del dolor se desprende la esperanza, la confianza, la voluntad, la entrega, y el relato se transforma en un mensaje que encierra una visión optimista para afrontar cualquier desgracia que se nos presente en la vida, no solo una cruel enfermedad”.Han pasado 24 años desde la primera publicación de Donde vuelan los cóndores y cabe preguntarnos: ¿cómo ha sido posible que la obra se mantenga vigente hasta nuestros días y que el interés por la lectura del libro no haya decaído entre jóvenes, profesores y adultos en general? Posiblemente son varios factores; entre ellos, que en su contenido destacan la potencia del amor y la fortaleza de la superación personal ante la adversidad. Al comenzar a leer, el lector puede suponer que la novela está centrada en una tragedia, lo que es efectivo. Sin embargo, del dolor se desprende la esperanza, la confianza, la voluntad, la entrega, y el relato se transforma en un mensaje que encierra una visión optimista para afrontar cualquier calamidad que se nos presente en la vida, no solo una cruel enfermedad (…)