Mujeres del rock. Su historia

Smith vivía como cantaba: libre y sin tapujos. Como el título de la canción afirma: no es asunto de nadie. Vestía de manera llamativa, era bisexual y cantaba sin miedo sobre sexo en canciones como «He’s Got Me Going». Las mujeres también podían ser sexuales, el placer no era territorio exclusivo masculino. En «Wild Women Don’t Have the Blues», un tema de Ida Cox, Bessie nos contaba que nunca iba a pasarse una noche despierta, en casa y sola, esperando a su hombre. Ella iba a lanzarse a la calle a disfrutar de la vida

Dentro de la vertiente más folk encontramos también a Joan Armatrading.

En su álbum homónimo de 1983 logró juntar a toda una serie de féminas del rock para una de sus canciones: Nancy Wilson de Heart a la guitarra, Gina Schock de las Go-Go’s a la batería, Laurie Anderson al violín, Tina Weymouth de Talking Heads al bajo, Patti LaBelle a los coros y Valerie Simpson al piano. Ahí es nada.

etty Davis era una mujer agresiva sobre el escenario y fuera de él, agresiva en el buen sentido de la palabra, no nos equivoquemos. Pero una mujer que no era sumisa, que no adoptaba ese papel, en aquella época no era solo algo inusual sino muy mal visto. Hoy no se entenderían artistas como Erykah Badu o incluso Beyoncé sin mujeres como Betty Davis.

La radio no ponía sus canciones por sus letras sexualmente explícitas.

Miles también animó a Betty a grabar sus propios temas, incluso los produjo, a pesar de que tardaron años en ver la luz. Fue gracias a Betty Davis: The Columbia Years 1968-1969 publicado por Light in the Attic en 2016. En estos temas producidos por Miles Davis aparecen John McLaughlin, Herbie Hancock, Mitch Mitchell, Wayne Shorter y Chick Corea. Pero el verdadero potencial sonoro de Betty Davis vino en los setenta. Aunque se había divorciado ya de Miles Davis conservó su apellido y publicó tres joyas musicales. En 1973 apareció Betty Davis, un disco en el que contó con el batería de Sly Stone, Greg Errico y las Pointer Sisters, entre sus colaboradores.

n 1991 los miembros de la Velvet colaboraron en su disco I Spent a Week There the Other Night. Dos años después la banda volvía a reunirse y publicaban en directo Live MCMXCIII. Maureen Tucker ha seguido su carrera en solitario, totalmente alejada de la fama, pero convirtiéndose en una figura de culto de la música inde

Tucker produjo una interesante carrera en solitario. Aunque todos sus discos se publicaron en sellos independientes, ella era la principal compositora, cantante y guitarrista. Playin’ Possum fue su primer álbum en 1981. Sus discos eran relatos de una vida dura como madre soltera ganando el sueldo mínimo e intentando que su música saliese de las cuatro paredes de su casa.

Tucker quiso volver a la música pero se lo pusieron bastante difícil. Había estado demasiado tiempo fuera de juego

Cuando sus hijos fueron mayores, Maureen Tuc