Claudia y Claudio se conocen viendo películas de aliens. Entre boliches de media noche, películas raras y maltas con huevo, secretamente, ambos personajes se enamoran mientras recorren el centro de la ciudad. Pero Claudio intuye que Claudia guarda un triste secreto. La prosa de Alejandra Costamagna está llena de humor y momentos tristes. Llena de silencios también, generando así atmósferas llenas de intimidad entre sus personajes.