El fútbol es el deporte más popular del mundo. En el verano de 2018 se celebran en Rusia las últimas finales de la Copa Mundial, en las que participan algunos de los mejores (y quizás más afortunados) equipos del mundo. La competición verá a los equipos divididos en miniligas, según sus clasificaciones mundiales y un sorteo. Los dos primeros equipos de cada grupo pasan a las fases eliminatorias.
Los dos mejores competirán en la final. Hay una apuesta más que razonable de que los campeones existentes, Alemania volverá a llevarse el trofeo, aunque Brasil, Argentina, España y Francia tendrán sus oportunidades. Los belgas tienen el equipo soñado, y podrían triunfar, mientras que los de Arabia Saudita y Panamá deberían aprovechar al máximo su tiempo en Europa del Este — probablemente será de corta duración. En cuanto a Rusia, el de menor rango de la competencia, bueno, ¿quién sabe? La ventaja de jugar en casa puede contar mucho.
Este breve enfoque sobre la Copa Mundial es de gran relevancia para el libro que sigue. Considera el equipo de abajo:
Porteros: Jan Oblak, fiel a los gigantes españoles, el Atlético de Madrid — un equipo cuyo reciente éxito en desafiar a los gigantes establecidos de La Liga, Real Madrid y Barcelona, se ha construido sobre una defensa valiente y desafiante; Gianluigi Buffon, legendario jugador entre los postes.
Defensores: David Alaba, el pivote del Bayern de Múnich; Antonio Valencia, el extremo del Manchester United; y Virgil van Dijk, el defensa más valorado de la Premier League inglesa, que acaba de ser transferido por una cantidad récord (para un defensa) que se acerca a los 100 millones de dólares, Giorgio Chiellini, un defensa central duro y sin tonterías con más de un toque de habilidad.
Mediocampistas: Christian Pulisic, el bien considerado centrocampista de Borussia Dortmund; Arjen Robben, el mago del Bayern de Munich y ex mago del Chelsea por el ala; Daniele De Rossi, un centrocampista defensivo que entraría en cualquier equipo del mundo.
Atacantes: Alexi Sánchez, en el momento de escribir este artículo, el destacado jugador del Arsenal de Europa; Gareth Bale, el maestro del ataque del Real Madrid; Pierre Emerick Aubameyang, uno de los delanteros más prometedores del planeta.
Aquellos de ustedes con buenos conocimientos de fútbol se darán cuenta de que estos grandes jugadores, junto con muchos más, son algunos de los gigantes del juego que no aparecerán en las finales de la Copa Mundial, aparte de quizás en el recuadro de comentarios, en la silla de los expertos o en las columnas de los periódicos de junio de 2018.
¿Cómo puede ser esto? ¿Cómo es posible que esas personas no representen a sus países en el escenario más grande de todos?
La respuesta, como sabemos, es que el fútbol es un juego de equipo, donde los talentos colectivos de los jugadores superan las habilidades individuales del maestro. Los grandes equipos, naturalmente, incorporan tales talentos dentro de su plantilla, pero es muy frecuente que un equipo que trabaja en conjunto y se combina bien supere a un equipo compuesto por individuos más talentosos que son jugadores de equipo menos efectivos.
Y el secreto del éxito es la posesión del balón. El pase y la posesión que esto ayuda a retener son realmente dos de las partes más importantes del juego de un equipo de fútbol. Este libro analizará varias formas en que tanto los entrenadores como los jugadores pueden mejorar estos aspectos del rendimiento de su propio equipo…..