Siguiendo la estructura de los tomos anteriores, Fernando Benítez pone una página en blanco para que sea el indio chamán, el Notaste o el Ixcaichiong quienes hagan el relato de sus mitos, sus ceremonias y cuentos. En su intento de abarcar los grupos indígenas principales que se han resistido a la barbarie y al exterminiio, este quitno tomo de Los indios de México está dedicado a los tepehuanes y nahuas que constituyen los pilares de las culturas tratadas con anterioridad. Ensamblaje de ceremonias, oraciones chamánicas, mitos, cuentos y relatos en los cuales escuchamos las palabras de los nahuas y tepehuanes, este libro desemboca en una crítica a la antropología contemporánea y señala cuáles han sido los obstáculos para conocer a los indios mexicanos.