Qué significa amar verdaderamente a alguien? Hubo una época en mi vida en que creía conocer la respuesta
Alex Summerцитирует2 года назад
pueden adoptar una presencia física dolorosa, casi viva,
dilugo11цитирует4 года назад
me había dicho —y demostrado— que amar significa preocuparte más por la felicidad de la otra persona que por la tuya propia, sin importar las elecciones dolorosas que tengas que asumir para lograrlo.
dilugo11цитирует4 года назад
parte el corazón, pero, ¿sabes una cosa?, yo todavía sigo enamorado de ella, y para mí eso significa que no quiero nada más que verla feliz en esta vida. Es mi mayor deseo. Es lo que siempre he deseado para ella.
dilugo11цитирует4 года назад
también aprendí que se puede seguir adelante, por más que parezca imposible, y que, con el tiempo, el dolor… merma. Es posible que no desaparezca por completo, pero después de un tiempo la carga se vuelve más llevadera.
dilugo11цитирует4 года назад
quiero —susurré.
Siempre había imaginado que costaría mucho decir esas dos palabras juntas, pero no fue así. En toda mi vida no había estado tan seguro de mis sentimientos, y aunque esperaba que algún día pudiera oír en boca de Savannah las mismas palabras dedicadas a mí, lo que más me importaba era saber que era yo el que había decidido amarla, sin ataduras ni ilusiones.
dilugo11цитирует4 года назад
podía pensar en nadie más que se asemejara remotamente a ella, tanto en apariencia como en personalidad, y me pregunté de nuevo qué era lo que la había atraído de mí.
dilugo11цитирует4 года назад
Únicamente acepto el hecho de que no tengo que hacer lo mismo que hace el resto; hago lo que más me conviene y punto.
dilugo11цитирует4 года назад
la universidad a veces puedes elegir a tus profesores, siempre y cuando seas flexible con tus horarios. Eso es lo que me gusta. Antes de empezar, fue el consejo que me dio mi padre. Me dijo que eligiera mis clases teniendo en cuenta al profesor, siempre que eso fuera posible, en vez de la materia.
dilugo11цитирует4 года назад
Me gustaba estar a solas con ella, y quería pasar más tiempo así. No sólo esa noche, sino también el día siguiente y el próximo. Todo —desde su forma relajada de reír hasta su inteligencia y su evidente interés por el prójimo— se me antojaba como una bocanada de aire fresco y deseable. Pero pasar el rato con ella también hacía que me diera cuenta de lo solo que había estado.