—¡Ah! –dijo Michel, aliviado–, ¿tienen ustedes poesía moderna?
—Claro. Entre otras, las Armonías eléctricas, de Martillac, obra premiada por la Academia de Ciencias, las Meditaciones sobre el oxígeno, del señor de Pulfasse, el Paralelogramo poético, las Odas descarbonatadas...