Frente a una de las tragedias más terribles que pueden sufrir unos padres como es la pérdida de un hijo o una hija, ¿cómo continuar viviendo? ¿Hay posibilidad de seguir adelante habiendo curado el corazón doliente? A través de varias historias cedidas por las familias, principalmente a través de la voz de la madre, se tratan los temas universales y recurrentes que van surgiendo en la elaboración de un duelo.
Cada vivencia, narrada desde lo más hondo de corazones que aún sufren y echan de menos al que ha marchado para siempre, tiene una fuerza que atrapa en el relato y hace más sencillo el tratamiento y la comprensión de las cuestiones que se plantean, apelando tanto a las emociones como al comportamiento que se despliega para resolver la situación.
Dado que en la mayoría de asociaciones para el duelo no está permitido hablar de cuestiones religiosas, esta obra precisamente exalta la vida desde la perspectiva de la alegría de conocer a Dios y las reflexiones que pueden venir a la mente humana cuando ocurren tragedias que asolan el espíritu.