Textrovert

Su futuro era un gran signo de interrogación y desconocía la respuesta.

El destino tenía un retorcido sentido del humor

Supongo que es su venganza —murmuró él como ensimismado—. Yo le robé a su chica, y él me roba a mi hermana.

Zach siempre se quejaba de que J. T. era capaz de usar todos sus cartuchos para ganar un partido. Explotaba las lesiones y las debilidades de otros jugadores sin miramientos. Zach decía que J. T. era un capitán despiadado, sin espíritu deportivo ni respeto por el juego.
Todo se reducía a una pregunta: ¿Quién era exactamente James Talon Harrington IV? ¿Era J. T., que no se detendría ante nada para ganar? ¿O Talon, que no se detendría ante nada para recuperarla?

En mi locura hay un método.

Eres la canción que no tiene fin.

Hay muchas cualidades que admiro en una persona, pero la mayor es la capacidad de decir que lo siente. No estoy hablando de las disculpas rápidas que la gente dice cuando tropieza con alguien por la calle, sino de las disculpas profundas y francas que te despojan de tu ego y te dan una lección de humildad ante la persona con la que has sido injusto.

ella dejó que el dueño de su corazón la atrapara por siempre jamás.

¿Alguna vez te ha gustado alguien tanto que cuando le haces sonreír o reír te sientes el amo del mundo?

En ese momento, estaban solo los dos: Talon y Keeley.

Y era perfecto.