«Hay que oscilar entre la pasión y la sangre fría, sin detenerse en los términos medios.»
El título es la expresión más justa de este libro "Las palabras justas", se trata de un diario sumamente expresivo, un relato de la vida, con días tristes y días felices, escrito sin subterfugios y son estrategias ridículas de pudor y precaución.
«Uno escribe solo ante el peligro, no hay otra manera honesta de hacerlo, el menor atisbo de autocomplacencia es una señal de cobardía. Escribes contra ti primero y luego contra todo el mundo. Te pones a ti mismo contra las cuerdas, es el trabajo más solitario del mundo, no te tienes ni a ti, te presentas completamente despojado, es peor que el amor».
En estas páginas andan los momentos de los que se nutre la vida, los hijos, los amores, las clases de yoga, las visitas al psiquiatra, los encuentros fortuitos, los reencuentros, los paseos por el barrio, la escritura, la seducción y el paso del tiempo, las disquisiciones sobre la verdadera elegancia, Proust, las lecciones literarias y vitales de Chéjov, y el amor, siempre el amor.
«En el amor nada es una pérdida de tiempo, todo sirve, la experiencia más banal, más absurda, más ridícula, más humillante, más dolorosa, sirve, nada cae nunca en saco roto. Es imposible perder el tiempo con el amor, enamorarse −aunque solo sea durante dos días, aunque sea tontamente, aunque sea por despecho o por aburrimiento o por curiosidad− sirve siempre precisamente para lo contrario, para ganar tiempo».
Alguien puede enviarme el libro por favor. arletisbeatriz@gmail.com