La acción de Los cuatro libros nos sitúa en la China de los años 50 del pasado siglo. Su trasfondo es el confinamiento de cientos de miles de personas en «campos de reeducación por el trabajo» y la movilización de los campesinos para la producción de hierro y acero. Aquel despropósito fue el preámbulo de una de las mayores hambrunas de la humanidad. Yan Lianke recorre ese periodo con una creatividad desbordante y una prosa poética e incisiva, alternando con una maestría insuperable los lenguajes de la narrativa bíblica, la tradición confuciana y la mitología griega, así como la jerga política maoísta. Un niño y un escritor sobresalen entre los diversos personajes anónimos: el erudito, la música, el profesor de religión o el técnico del laboratorio. Los avatares y las vidas absurdamente truncadas de aquellos hombres y mujeres conforman este drama satírico, inspirado en hechos reales de la Historia. El autor da rienda suelta a su capacidad imaginativa sin la habitual autocensura practicada por los escritores chinos. Por ello, y ante su osadía, ninguna editorial del continente chino se atrevió a imprimir su obra. Finalmente se publicó en Hong Kong y Taiwán. Yan Lianke ha obtenido prestigiosos reconocimientos en China y el Premio Kafka Internacional en 2014. Finalista del célebre Man Booker International con El sueño de la aldea Ding y, en 2016, con Los cuatro libros. Esta gran obra está llamada a convertirse en un gran clásico universal de la literatura contemporánea.