Me encarné en un país de sequía. No solo era necesario que naciera allí donde reinaba la sed, sino también que padeciese el calor.
Por lo poco que sé del frío, lo habría estropeado todo. No es solo que aplaque la sed, es que retrae las sensaciones anexas. El que tiene frio solo tiene frío. El que se muere de calor es capaz de sufrir al mismo tiempo miles de cosa