"Musicalmente y líricamente, Red se parecía a una persona con el corazón roto. Estaba por todas partes, un mosaico fracturado de sentimientos que, de alguna manera, todos encajan al final. Feliz, libre, confuso, solitario, devastado, eufórico, salvaje y torturado por los recuerdos del pasado. Como si me probara piezas de una nueva vida, me metí en el estudio y experimenté con diferentes sonidos y colaboradores. Y no estoy segura de si fue vertiendo mis pensamientos en este álbum, escuchando a miles de sus voces cantar las letras de vuelta a mí en apasionada solidaridad, o si fue simplemente el tiempo. Aun así, algo se curó por el camino".