Cuentos de la selva, publicado en 1918 en Buenos Aires, es un libro de relatos infantiles protagonizados por animales y ambientados en la selva de Misiones, en el extremo noreste de Argentina.
Horacio Quiroga dedicó este libro a sus hijos, con quienes vivió un período de pobreza en un húmedo y pequeño sótano.
La narrativa de Cuentos de la selva es un tributo a la naturaleza y a su belleza, el escritor plasma en ella valores que debe tomar en cuenta la raza humana. Quiroga utiliza la personificación para lograr el objetivo didáctico de carácter ecológico de las historias, y entremezcla en la narración elementos reales y fantásticos.
Esta edición incluye las siguientes historias:
— La tortuga gigante
— Las medias de los flamencos
— El loro pelado
— La guerra de los yacarés
— La gama ciega
— Historia de dos cachorros de coatí y de dos cachorros de hombre
— El paso del Yabebirí
— La abeja haragana
— Anaconda
— el «Decálogo del perfecto cuentista»
— y algún relato terrorífico como «El almohadón de plumas».