“No sé si soy un buen escritor; creo ser un excelente lector o, en todo caso, un sensible y agradecido lector.” Esta frase de Borges, citada infinidad de veces, sigue reencontrando su sentido inequívoco. El 26 de julio de 1935, en una sección de la revista El Hogar titulada “Un cuento, joya de la literatura”, Borges explicaba por qué elegía el relato de May Sinclair —“Donde su fuego nunca se apaga”— como el cuento más memorable que había leído, al tiempo que mencionaba otros once. Esa declaración ha inspirado la presente antología, que reúne un variado grupo de magníficos relatos.