Sabes lo que es el festín de bodas, una vez que los invitados y los amantes lo han abandonado. El amanecer muestra el desorden que dejaron. Las jarras rotas, las mesas desordenadas, el fuego extinguido, todo conserva el sello de un tumulto que se ha endurecido. Pero leyendo esas huellas –me dijo mi padre– no aprenderás nada sobre el amor