Tenemos miedo de que nos supere, así que siempre buscamos huir de él. En nuestro interior hay soledad, miedo, ira y desesperación. Normalmente intentamos cubrirlo mediante el consumo. Hay algunos que para hacerlo buscamos algo para comer. Otros encienden la televisión. De hecho, muchas personas hacen las dos cosas a la vez. Incluso aunque el programa de televisión no sea interesante en absoluto, no tenemos el valor para apagarla porque, si la apagamos, tendremos que regresar a nosotros mismos y encontrarnos con el dolor que hay en nuestro interior. El mercado nos proporciona muchos productos para ayudarnos en nuestro empeño de evitar el sufrimiento que nos inunda.