Un libro arrollador, con una prosa cargada de sentido, sin pausas, que te deja sin aliento y que no te deja parar hasta terminar. Una historia que cuenta la realidad de un país que vive la violencia como el día a día, en donde la muerte es normalizada y las mujeres se prostituyen y aguantan a los machos que las maltratan y las embarazan y las abandonan a su suerte. Una historia de brujas, las brujas de Veracruz, de Alvarado y Catemaco que hacen amarres y limpias y preparan brebajes para expulsar niños no deseados. Todo eso y más tiene este libro de Fernanda Melchor, que cuenta de forma contundente está historia de la bruja de la Matosa y la realidad de muchas de las comunidades del estado de Veracruz.
Hace varios meses leí este libro en el club de lectura #brujasliterariasclub, es una de esas obras que te abofetean con la realidad. Crecí en un pueblo y quizá por eso el lenguaje, los personajes y las situaciones dramáticas y ridículas a la vez se me hicieron tan familiares. Mi personaje emblemático sin duda alguna "La chabela", fuerte y congruente de inicio a fin.
Fernanda Melchor me logró meter en este viaje como quien cae por un tobogán, adrenalina corriendo y quieres repetir.
No se cómo empezar a describir todo lo que este libro me transmitió. De entrada, lo empecé a leer ayer en la mañana y no pude para de leerlo hasta finalizarlo. Es impactante en más de un sentido, en donde coloquialmente somos testigos de los sucesos que ocurren en un lugar olvidado por Dios.
Impunidad, dolor, injusticias, cargado de una aura erótica bastante monstruosa que a uno no le gustaría atestiguar, pero que es muy real y está presente en muchos sectores marginales.
El dolor está presente en muchas formas en cada uno de los personajes, que nos muestran la horrible naturaleza que puede desprender de un ser humano.
La redacción se esté libro no se compara a nada que hubiera leído hasta el momento. Lo recomiendo ampliamente, aunque resulte pesado de leer en muchas de sus páginas.