Un recorrido lleno de olores, sabores, texturas, colores, múltiples paisajes y anécdotas. De un pueblo rescatado de la memoria de la autora, un hogar sumergido, retorna con melancolía la niñez, la vida sencilla y profunda del campo. Robo estos recuerdos de la autora para prestárselos, como voces colectivas, a mis ancestras de la provincia mexicana. ¡Muy hermoso!
Nostálgica mirada de la infancia vivida en el campo, en la naturaleza. Los recuerdos entrañables del agua, los pantanos, el río, los bosques, los vecinos y vecinas, los juegos y más.