Ameno, a ratos humorístico, es una mirada ligera a un tema mayor. Se ha dicho que el descubrimiento más importante de la segunda mitad del siglo XX es revelación de la estructura del ADN.
Paul Strathern es filósofo y novelista pero aquí vuelca su habilidades como divulgador de la ciencia. Inicia con la contextualización del asunto donde destaca cómo progresaron los estudios de la genética. Repasa las ideas de Erasmus Darwin (el primero en hablar de la evolución de las especies) hasta Mendel, el padre de la genética moderna.
Strathern advierte de los peligros éticos de la biología molecular y como esos avances puede ser un peligro para los humanos y la vida en general. En Crick, Watson y el ADN se focaliza en la convergencia de esos científicos que revelaron al mundo la estructura del ADN y las vicisitudes del proceso. Más allá de la anécdota, el autor deja en claro cómo ese desciframiento puede ser una caja de pandora que nos lleve a modificar la vida.
Es interesante como el autor, en su papel de divulgación se atiene a los hechos sin dejar de expresar sus opiniones, por un lado el contexto, por el otro, los afanes individuales y al final su velada opinión de un tema que en los años inmediatos dará mucho de qué hablar.