Rosenberg había comparado la investigación sobre las armas de fuego con el progreso realizado en la reducción de las muertes por accidentes de tráfico, una analogía que más adelante empleó Barack Obama durante su presidencia. «Con más investigación, podríamos mejorar la seguridad en torno a las armas de fuego de la misma manera que con más investigación hemos reducido las víctimas de accidentes de tráfico en los últimos treinta años —dijo Obama en 2016—. Investigamos los daños que puedan causar los coches, la comida, la medicina, incluso los juguetes, para hacerlos más seguros. Y ¿sabéis qué? La investigación y la ciencia son algo bueno. Funcionan».