todo el período de la gran tribulación.
Es notable el hecho de que entre las visiones de los capítulos 6.º y 7.º, ya sea de sellos, de trompetas o de copas, encontramos siempre detenciones momentáneas (Apocalipsis 10:11-14 y 16:13-16). Es como si la ira de Dios se aplacara para dar oportunidad al ser humano para que se arrepienta. Es como la bonanza que sigue a la tormenta o el día que sigue a la noche.
El número cuatro
El número cuatro es el favorito en este capítulo 7. Se menciona a «cuatro ángeles», «cuatro ángulos», «cuatro vientos» (v. 1); «ciento cuarenta y cuatro mil sellados», o sea, 3.600 x 4 = 144.000 (v. 4); la gran multitud vista por Juan es clasificada en «naciones y tribus y pueblos y lenguas», o sea, cuatro grupos (v. 9); «cuatro seres vivientes» (v. 11); de los redimidos se dicen cuatro bendiciones: «no tendrán hambre ni sed, y el sol no caerá más sobre ellos, ni calor alguno» (v. 16).