Poco a poco Almudena Grandes se ha ido metiendo bajo mi piel de lectora con personajes entrañables, reales, muy humanos y con los que me he ido identificando a fuerza de retratarme. Un libro lleno de fortaleza y esperanza que retrata la situación crítica de España actualmente
Memorable como los 4 episodios de una guerra interminable anteriores. Muy recomendado.
La literatura erótica es consistentemente floja, no son muchos los libros que podrían ser excepcionales, pero de vez en cuando aparece uno como: Las edades de Lulú, novela que obtuvo el IX Premio La sonrisa vertical, bien merecido y aún mejor escrito.
Se podría definir como una historia de amor, tal vez, porque el amor y el sexo no van de la mano, y las novelas eróticas tienen eso como fundamento, nos es idilio sino control; como cualquier historia de amor, no se resigna a dejar de serlo, es compleja, envolvente y arriesgada, porque Lulú, con una evidente falta de afecto, se ve sumida en su infancia y sus temores para enamorarse, a sus quince años, de un amigo de la familia, a quien hasta entonces ella había deseado vagamente.
Después de esta primera experiencia, Lulú, niña eterna, alimenta durante años, en solitario, el fantasma de aquel hombre que acaba por aceptar el desafío de prolongar indefinidamente, en su peculiar relación sexual, el juego amoroso de la niñez. Crea para ella un mundo aparte, un universo privado donde el tiempo pierde valor. Pero el sortilegio arriesgado de vivir fuera de la realidad se rompe bruscamente un día, cuando Lulú, ya con treinta años, se precipita, indefensa pero febrilmente, en el infierno de los deseos peligrosos.