Siempre había pensado que mi lugar estaba en otra parte. Durante toda mi vida había vivido en el mismo sitio, pero nunca había sentido que fuera mi hogar. Cuando nos mudamos a una nueva ciudad, lo dejé todo atrás. Mi vida, mis amigos… Pero no me importaba, porque cambiar mi vida por completo sería un soplo de aire fresco.
Todo parecía ir a la perfección hasta que lo vi. Axel era alto, moreno y una persona que nunca había visto. O eso creía yo. Una parte de mí, me dice que ya le había conocido antes; la otra, me asegura que eso es imposible. El problema es que no sé a cuál de las dos debo creer.
Mi nombre es Nerissa y esta es mi historia.