Todavía recordaba bien, según me dijo Pollak, que había escrito en su diario el nombre de Dreyfus. A la vista de las pruebas, en aquellos momentos todavía creía que lo absolverían. Todos lo creían. El siglo acabará con dignidad, escribió en su diario. Patético, ¿no es cierto?, dijo él, pero es lo que pensaba por aquel entonces. 1 de julio de 1899. Todavía se veía a sí mismo escribiendo la fecha en la página con tinta negra, el uno, el ocho, los dos nueves. Pollak lo contó con todo detalle. Juicio en Rennes, acusación de alta traición contra el oficial judío Alfred Dreyfus.