Una grata introducción a la literatura de Kenzaburo Oé.
A través de una voz narrativa en primera persona conoces al protagonista de la novela, sin nombre, así como al resto de los chicos que forman parte de un reformatorio y viajan de pueblo en pueblo hasta encontrar acilo. En plena guerra, llegan a un pueblo golpeado por la miseria, enfermedad y sobre todo rechazo hacia ellos. Así, tendrán que lidiar con el maltrato de los campesinos y todo lo que viene a partir de su llegada.
Sin duda un libro crudo que nos hace reflexionar sobre la maldad humana y hasta donde puede llegar. Espero leer algo más de Kenzaburo muy pronto.