Para reafirmar lo que ahora ya debería ser evidente: una vagina sana y bien tratada sexualmente proporciona de manera regular una fuerte activación de dopamina para el sistema de recompensa femenino, así como dosis de oxitocina, para la capacidad de conexión, y opioides que provocan la sensación de dicha. Así pues, la vagina proporciona a las mujeres los sentimientos gracias a los cuales quieren crear, explorar, comunicarse, conquistar y trascender