VALS DE LAS CIUDADES
Me propuse escribir un vals de las ciudades,
un vals para bailarlo contigo,
un vals que mencionara todos esos lugares
donde fuimos felices
y donde alguna vez, quizá, regresaremos.
Pero el maldito vals no sale nunca,
pasan los años y este vals no sale.
Un, dos, tres, un, dos, tres
y este maldito vals no sale nunca.