Blake Pierce

“Lejos de casa
Tan lejos de casa
Este pequeño bebé está lejos de casa."

Tarde o temprano tenía que regresar la agente que había perdido, y está de vuelta, con más fuerza, más brutalidad, menos contemplaciones y toda esa genialidad que le caracteriza. Riley es la agente especial del FBI que dedica su vida a perfilar y atrapar asesinos seriales, y ella, es tan o más despiadada que los monstros que persigue.

"Te consumes cada vez más
Día tras día
Demasiado triste para reír, demasiado triste para jugar."

Pongámonos en situación, la ciudad es Seattle, hombres y mujeres están apareciendo muertos, envenenados por una sustancia misteriosa. Lo que al principio supone un caso de muerte por casos de pacientes desahuciados es desvelado por la Dra. Shankar cuando se descubre un patrón, un compuesto químico conocido como Talio; el FBI llama a su mejor agente y Riley, atrapada en un callejón sin salida que no es otro que el de su compulsión por atrapar criminales, cede a la presión de su compañero Bill para atrapar al criminal.

Hospitales, asilos, una casa en el lago, enfermeras, cuidadores y pacientes psicóticos, Riley se sumerge junto a Bill en un mundo que apenas contemplarían en sus peores pesadillas, sin embargo, la agente Paige sabe cómo sumergirse en aquellas mentes, lo que convierte este libro en un viaje trepidante y aterrador; la locura no tiene límites y un ángel para este final se halla desatado, sediento y cubierto de diferentes oscuridades.

Lo más hermoso fue conseguir un libro más para mi colección de libros que siempre querré leer, pero que jamás podré hacer por que son ficción, se trata de ‘El largo recorrido’ de Amanda Somers, un libro que, según la novela, fue muy famoso y cambió la vida de muchas personas. Otra cosa, antes del canto final, no es un secreto que tengo un crush literario con Riley, desde que la conocí soy un fan irredento, sin embargo, no he podido ser indiferente al talento, carácter y fuerza de la Dra. Shankar, un personaje impresionante, decisivo, ágil y extremadamente capaz.

"No más suspiros,
Solo cierra tus ojos
Y te irás a casa en tus sueños.”

Toda la serie es realmente increíble. Si te gustan las novelas de policías y asesinos en serie, este libro es para ti!!

Súper

Super

Por supuesto que tenía que regresar a las páginas escritas por Pierce para reencontrarme con mi crush literario, la agente especial Riley Paige (no te enojes Bill, son un gran equipo), pero esta vez, se trata de una travesía por los lagos represados de Phoenix, Arizona.

Primero, decir que me resulta un poco difícil establecer una opinión correcta, por que hablar de este nuevo monstro sin spoilear la historia es complejo, en fin; nadie se preocupa realmente cuando prostitutas aparecen muertas en Phoenix, hasta que descubren un patrón en sus asesinatos, entonces se dan cuenta que están tratando con un posible asesino en serie. Es momento de involucrar al FBI, en especial a su mente más brillante para resolver el caso, la Agente Especial Riley Paige.

Riley, recuperándose de su último caso y tratando de lidiar con las consecuencias, está renuente al principio. Pero cuando se entera de la naturaleza grave de los crímenes y entra en cuenta que el asesino pronto atacará de nuevo, se ve obligada a acudir. La búsqueda de Riley la lleva al inquietante mundo de prostitutas, hogares desestructurados y sueños rotos. Aprende que, incluso entre estas mujeres, hay destellos de esperanza, esperanza que está siendo robada por un psicópata violento.

Es un libro demasiado personal para Riley, a pesar de que la investigación la lleva a asomarse al abismo que no esperaba reencontrar, regresa de él entera, consciente y bastante más agresiva, lo que solo hace crecer al personaje, me ha dejado enganchado, la sencillez y ligereza de la historia hace que los momentos difíciles se disfruten muchísimo, es una historia con poca acción, pero mucha reflexión.

Perfecto 😻

Ok, "un monstro a la vez", así que primero, admitiré que tengo un "crush" literario con la agente especial Riley Paige, descubrí su historia este año y no me pude contener a seguir leyendo sobre ella, y me encantó.

Una sinopsis sencilla: Mujeres están siendo asesinadas en el norte del estado de Nueva York, sus cuerpos encontrados misteriosamente colgando en cadenas. El FBI está en el caso. Dada la naturaleza bizarra de los asesinatos y la falta de pistas, sólo hay una agente a la que pueden recurrir—la Agente Especial Riley Paige.

Pero hay más en el libro, muchísimo más; toda una trama que se hila de forma ágil y solvente, con un desarrollo trepidante y acción a raudales que te envuelve en el caso que atiende y el que se ve forzada a atender. Sigue siendo la misma Paige, la mente poderosa y siniestra que es capaz de meterse en la piel del asesino para encontrar las pistas, los entiende, empatiza con ellos y los describe con una destreza que impresiona y atemoriza, pero también, es humana, siente, vive y anhela lo más sencillo y lo más complejo, es amiga, compañera, maestra y madre, y todo ello se conjuga en una novela detectivesca que te deja sin aliento, que emociona y te hace pensar en lo mal que está el mundo y lo bien que hace tenerla de nuestro lado.

No es un secreto que Riley Paige es mi crush literario, he devorado su saga con muchísimo entusiasmo, pero sabía, muy en el fondo, que pronto aparecería una novela que no me atrapara tanto, por fin llegó, es el cuarto libro, y no es malo, solo no me gusto tanto.

Primero te cuento de que va, en un tramo de carretera en Delaware están despareciendo mujeres, sin embargo, tardan días en aparecer muertas, sus cadáveres exhibidos de formas extrañas y misteriosas, ya sabemos todo que en cuanto se identifica un patrón, estamos tratando con un psicópata, un asesino serial con sus motivos y particularidades.

El FBI, queriendo resolver el caso desesperadamente, urge a la agente especial Riley Paige a tomar el caso. Pero la brillante Riley por fin ha encontrado la paz en su vida familiar y está determinada a ayudar a su hija April a volver a la normalidad. Sin embargo, cuando los asesinatos se vuelven demasiado perturbadores, y cuando su excompañero Bill se lo ruega, Riley finalmente se da cuenta que no puede negarse.

Es aquí donde siempre me consigue atrapar este libro, Paige es única en lo que hace, sabe entender y ser empática con los asesinos que persigue, a la par, lleva una vida normal, lo que es muy difícil por el trabajo que realiza, lo bueno de este libro es que profundiza en ello y nos deja ver a una Riley más cotidiana vs, la adolescencia de su hija April, sin embargo, todo tiene un precio, y Paige se ve mermada en sus habilidades, eso no me gustó, tenía en ella el concepto de ser la que ordena el laberinto. El caso se complica tanto como la vida, y deja un final abierto que seguro te enganchará para seguir leyendo.

Muy bueno

Muy buen libro 👌👌