Maurice Leblanc (1864–1941) creó Arsène Lupin en 1905 como protagonista de un cuento para una revista francesa. Hasta entonces, Leblanc había estudiado derecho, trabajaba en la empresa familiar y había escrito algunos libros de poco éxito. Sin embargo, Lupin se convirtió en uno de los personajes más célebres de la literatura policíaca. Es un ladrón de guante blanco, culto y seductor, que roba a los malos. Es el protagonista de veinte novelas y relatos y sus aventuras lo han convertido también en héroe de películas y series para televisión. Para muchos, las historias de Arsène Lupin son la versión francesa de Sherlock Holmes.