Un gran número de investigaciones de neuroimagen, realizadas antes y después de la psicoterapia, muestran que el cerebro se reorganiza plásticamente durante el tratamiento, y que este cambio es tanto mayor cuanto más éxito tiene el tratamiento (Furman et al., 2002; Paquette et al., 2003; Goldapple et al., 2004; Martin et al., 2004).