Henry Cloud

Por su propia naturaleza, los cambios necesarios son reales y relevantes, y, si se implementan, pueden proporcionarnos resultados increíbles.

Para que haya algo nuevo, las cosas viejas siempre deben terminar y debemos dejarlas ir.

A menudo, el rompimiento de una relación, el fin de una amistad o actividad, o el término de compromisos son señales del inicio de una nueva vida.

Si no logramos terminar las cosas de manera apropiada, estamos destinados a repetir los mismos errores que nos impiden avanzar.

(1) Si una iniciativa está desperdiciando los recursos que pudieran servir para algo más prometedor, entonces se poda. (2) Si un esfuerzo está afectado y no se recuperará, se poda. (3) Si es obvio que algo ya está muerto, se poda.

Así que esta es la pregunta: ¿Estás obteniendo resultados promedio en relación al punto donde tu negocio o equipo se supone que debería estar?

“Aunque triste, es cierto que algunas personas no pueden enfrentar la verdad cuando esta causa incomodidad, pero esa no puede ser la razón que dirija tus decisiones.

Lo mismo es válido para la vida y los negocios: necesitamos tener una buena definición de lo que deseamos ver como resultado y podar lo innecesario apuntando al mismo.

No existen respuestas correctas, pero si no tienes claro lo que quieres lograr, no sabrás por dónde comenzar a hacer los cambios necesarios.

Las personas sabias saben cuándo renunciar. Los ganadores no desperdician su dinero después de haber obtenido malos resultados. O como dice la canción: “Saben cuándo detenerse y saben cuándo retirarse”.