Los espectros, como lo atestiguan numerosas fuentes antiguas10, exigen que los sacrificios sean realizados en las tumbas. De esta forma, el territorio mismo es fundado o protegido, según los casos, por la presencia de un espectro que establece el contacto entre el mundo natural, el mundo humano y la muerte ineluctable que es lazo que anuda y desanuda, que anuda desanudando, las relaciones entre la vida y la muerte.