Extrañas profesiones eligen los hombres, ¿no creen ustedes? No quiero decir que haya oficios que son más pintorescos o más inesperados que otros. Quiero decir que las gentes no viven para ser, o tratar de ser, las mejores personas posibles, sino para agregar a su nombre títulos sonoros, secos y vacíos, ropajes falsos e innecesarios que terminan por suplantar a quienes aplastan y roban.