El maternés es una de las maneras a través de las que las madres y otras personas desarrollan un fuerte vínculo con los niños pequeños. Además, sienta las bases para el desarrollo del lenguaje. Sin darnos cuenta, al hablar a los bebés de este modo, comenzamos a enseñarles su lengua materna —o lenguas, por supuesto, si el niño pertenece a una familia en la que se habla más de un idioma—.