Una segregación espacial entre la ciudad de los ricos, cercada y protegida por muros, policías y otras barreras menos visibles, y la ciudad de los pobres, en situaciones marginales, sean periféricas o en el mismo corazón de la ciudad. La ciudad de los excluidos, de los anónimos, de los sometidos a la lógica del dominio del espacio urbano impuesto por los ricos.