o diría que la pobreza es un bien odioso: es un gran incentivo para los esfuerzos activos y un gran promotor de sabiduría para aquellos que la aceptan con resignación y paciencia
berenice2001rosaцитирует2 года назад
Y Séneca[291] tiene, indudablemente, mucha razón cuando afirma que no sabe distinguir entre un borracho y un loco (ahora bien, la locura, cuando ataca a un pecador dura mucho tiempo más que una borrachera).