Memorias del subsuelo fue escrita en un momento en el que el autor padecía grandes trastornos emocionales producto de que su mujer se estaba muriendo y él mantenía una relación sentimental con una joven, lo que le causaba dudas y remordimiento. Al tiempo del fallecimiento de su esposa, Maria, también falleció su hermano más cercano, Mijaíl. A estos problemas personales, se agregaban además situaciones político sociales muy complejas, tales como la clausura de sus revistas por parte de las autoridades y su adicción al juego, que le traería graves problemas financieros. El resultado de esta situación histórica, personal y anímica es una obra maestra que en pocas páginas concentra más contenido filosófico que ninguna otra obra del autor, y en la que se plantean las cuestiones más extremas que un hombre pueda experimentar. En Memorias del subsuelo un funcionario va narrando las memorias de su tragedia personal, y Dostoyevski logra hacer de él uno de los mejores y más sorprendentes antihéroes de su obra literaria.
Fiódor Dostoievski (1821 – 1881) es considerado el autor más destacado de la literatura realista de la Rusia zarista y uno de los autores más influyentes de la literatura occidental. Precursor del existencialismo y máximo representante de la «novela de ideas», sus obras exploran la psicología humana. Sus novelas y su vida están fuertemente enlazadas debido a que usó diversas experiencias personales para dar mayor realismo a las historias, lo que a su vez les dio un tono semi-autobiográfico.