Todo comienza con la mente
No importa lo que quieras conseguir en la vida, lo que te haga feliz o cómo esperas que te salgan las cosas: todo empieza en tu mente.
Es decir, que tu mente -y tu mentalidad, más concretamente- es responsable del éxito que tengas en cualquier carrera o actividad, de cómo te vean los demás, de tu salud, de tu fuerza física e incluso de lo contento que estés con lo que hayas conseguido.
Cualquier cambio que quieras crear en tu vida comienza con la decisión de hacer ese cambio. Esto es suficiente para significar que todo cambio tiene que venir necesariamente de dentro para empezar. A continuación, es tu convicción sobre ese cambio lo que te asegura que seas capaz de llevarlo a cabo, tu planificación y tu determinación. Y, por último, es tu percepción de ese cambio la que determina si estás contento o no con él.
Fíjese en cualquiera de las personas con más éxito del mundo. Una cosa que casi siempre tienen en común es un compromiso y una determinación absolutamente inquebrantables con lo que quieren conseguir. Por ejemplo, Arnold Schwarzenegger estaba tan decidido a convertirse en campeón de culturismo que incluso se colaba en el gimnasio los días que estaba cerrado para entrenar. Una vez incluso se escapó de los cuarteles del ejército durante su reclutamiento para asistir a una competición.