El reflejo de la lucha callada, ante el machismo, de millones de mujeres en todo el mundo, desde la óptica particular de Marge Simpson.
Yo estaré aquí para auparte, sostenerte y para sacrificarme. Yo, que ya he asumido mi papel. Yo, que no estoy dispuesta a que repitas mis errores. Yo, que quiero que tú, Lisa, seas lo que a mí no me dejaron ser: autónoma, independiente, una mujer del siglo XXI. Que si quiere llorar, llora; que si quiere gritar, grita. Que debe gritar. Y sonreír únicamente cuando de verdad quiere hacerlo.
¿Es Marge Simpson una mujer dibujada para su familia... y nada más? Ella toma la palabra –y ya era hora– para demostrar que bajo su pecho amarillo late el corazón de una mujer corriente, sí, pero también revolucionaria. Ignorada, pero con mucho que decir. Sumisa, pero decidida a lograr que todo cambie. Porque, sin duda, #MargeToo.